Autor: Alfredo Paseyro - ASA / Fecha: 25/01/17
La introducción de la tecnología Bt, de resistencia a orugas barrenadoras y cortadoras, junto a la mejora genética permanente han sido las causas principales que han permitido que el maíz pueda ser cultivado en gran parte del territorio nacional mediante manejos de fechas de siembra sumamente elásticos. Por ejemplo, la siembra de maíz tardío, que tenía escasa rentabilidad y seguridad de cosecha, hoy es una realidad comercial que abarca el 50% de la superficie sembrada con este cereal.
El problema es que la presión de las plagas es continua, y la no adopción de prácticas de manejo recomendadas plantea problemas que afectan el desarrollo tecnológico y, en última instancia, al propio productor.
No todas las orugas son controladas
Las poblaciones de insectos tienen un nivel de diversidad natural que les permite a algunos individuos sobrevivir a la protección de los maíces Bt y reproducirse, dejando descendencia resistente. El aumento de la cantidad de orugas resistentes hace que una población de insectos que era controlada por el cultivo Bt deje de serlo con la efectividad inicial.
Para retrasar este fenómeno natural de la evolución de la resistencia se han diseñado planes de Manejo de Resistencia de Insectos (MRI), que consisten en aplicar buenas prácticas de manejo del lote para maximizar rendimiento y disminuir costos.
Los planes de MRI son necesarios para extender la vida útil de estas biotecnologías y combinan rotación de cultivos, buen control de malezas, tratamiento del rastrojo, monitoreo periódico de plagas y, especialmente, la siembra de refugios.
El refugio es una porción del lote sembrada con un híbrido no Bt (puede ser tolerante a herbicidas) de similar ciclo de madurez que el maíz Bt. El refugio es el proveedor de individuos susceptibles, los cuales, al aparearse con los resistentes provenientes del Bt, generan descendencia susceptible al control de la tecnología.
Por lo tanto, para todas las tecnologías Bt, la siembra de refugio es una práctica de manejo muy importante.
Refugio estructurado
Consiste en sembrar, en la misma fecha, una porción del 10% del lote con maíz no Bt (9+1) de similar ciclo de madurez que el maíz Bt. Este tipo de refugio es efectivo tanto para barrenador del tallo como para gusano cogollero.
Refugio integrado o refugio en bolsa
Consiste en una mezcla de semillas Bt y no Bt en la misma bolsa. En este caso, las plantas no Bt quedan distribuidas al azar en el lote. Facilita la siembra del refugio y maximiza el cumplimiento, pero es solamente efectivo para barrenador del tallo.
Prácticas de manejo más adecuadas
Entre las empresas socias de la Asociación de Semilleros Argentinos (ASA) hay consenso sobre que las siguientes prácticas de manejo son las más adecuadas para asegurar la sustentabilidad de los maíces Bt.
. Manejo de gusano cogollero (Spodoptera frugiperda)
Presiembra
Siembra
Post-siembra
Manejo de barrenador del tallo (Diatraea saccharalis)
Presiembra
Siembra
Post-siembra
En vista de que en el corto plazo no se prevé la comercialización de nuevas tecnologías Bt para maíz, la industria semillera nucleada en ASA está trabajando fuertemente para concientizar sobre el manejo adecuado de las actuales, a fin de sustentar su durabilidad en el tiempo. Dado que el refugio es una herramienta clave en el paquete de buenas prácticas de manejo, la oferta de semilla comercial 9+1 está garantizada para esta campaña.